Tijuana, BC – En el ‘corazón’ de Tijuana, un grupo de veteranos deportados se reunió para encontrar esperanza en la búsqueda de justicia y reconocimiento.
Mediante un programa binacional, organizaciones de veteranos en Estados Unidos han ofrecido asesoría legal gratuita a aquellos que sirvieron bajo la bandera estadounidense, pero que, tras perder su residencia, fueron deportados a México.
Hoy, estos hombres y mujeres, muchos de ellos de edad avanzada, enfrentan la dura realidad de haber sido expulsados del país por el cual arriesgaron sus vidas. Sin embargo, por unas horas, recibieron orientación legal y valioso acompañamiento humano.
Jesús García, un veterano de la Marina de Estados Unidos que sirvió en la Guerra de Vietnam, comparte su historia. Con 75 años, pasó 72 en la ‘Unión Americana’ hasta su deportación el año pasado.
Con una voz pausada y una mirada cansada, resume su experiencia en una frase que refleja el desarraigo de miles.
“Tengo mi hoja de trabajo, tengo mi llave, y la ropa que tengo es lo que me dejó migración ICE. Tomó todo”, comentó García.
Jesús sufre de problemas en la columna y el cuello que dificultan su movilidad, pero se aferran a la esperanza. Durante este encuentro, abogados especializados revisaron cada caso de manera personalizada para evaluar la posibilidad de restaurar sus beneficios médicos, pensiones, o incluso tramitar su regreso legal a Estados Unidos.
La abogada Megan Day, del Centro de Defensores de Inmigrantes, explicó que muchos veteranos enfrentan un vacío legal que les impide acceder a los programas y servicios que deberían recibir por ley.
“Los veteranos tienen un programa en Estados Unidos que les permite acceder a sus beneficios médicos aquí, y es difícil acceder a esos beneficios en otros países. Estamos aquí para ayudarles a acceder a los beneficios de un gobierno de Estados Unidos”, enfatizó Day.
A lo largo del día, la atención fue personalizada. Además, las organizaciones implementarán asesorías virtuales para veteranos que aún se encuentran en Estados Unidos sin regularizar su estatus migratorio y que enfrentan un riesgo de deportación inminente.
Robert Vivar, representante de Veteranos Deportados Unificados, destacó la importancia de la atención individual, ya que cada situación es única.
“Cada caso es diferente, por lo que necesitamos conocer a fondo cuáles son los motivos que los traen aquí sin estatus legal”, mencionó Vivar.
El objetivo de estas jornadas es “construir puentes” entre ambos países para que estos exmilitares no sigan siendo invisibles ante el sistema que en algún momento los consideró héroes.
Hasta la fecha, el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) no ha proporcionado cifras oficiales sobre el número de veteranos deportados. Sin embargo, las organizaciones defensoras estiman que hay alrededor de 10,000 veteranos dispersos en distintas ciudades fronterizas de México.
En Tijuana, la frontera más transitada del mundo, estos hombres, que sirvieron en conflictos lejanos y pagaron un alto precio, buscan algo más que una simple ayuda legal: buscan reconocimiento, dignidad y una segunda oportunidad.

Original source: Noticias San Diego
By Claudia Orozco
3 Nov, 2025





