
Por Karen Gutierrez, Univision
Denver, Colorado — 19 de noviembre de 2025
Un video viral ha desatado la indignación en redes sociales, mostrando a un inspector del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de Denver vertiendo cloro sobre los alimentos de un vendedor ambulante conocido como “Tacolorado”. La ciudad defiende esta acción como “necesaria”, citando violaciones continuas a las normativas de salud y seguridad que, según los funcionarios, ponían en riesgo a los consumidores.
Contexto del caso y antecedentes con el vendedor
La portavoz del DDPHE, Amber Campbell, reveló que la ciudad había estado monitoreando al vendedor durante varias semanas por operar sin licencia y por no adherirse a prácticas esenciales de inocuidad alimentaria.
“Nuestro equipo ha interactuado con este vendedor en múltiples ocasiones, brindando educación y recursos bilingües para ayudarle a cumplir con las normativas”, afirmó Campbell. “A pesar de nuestros esfuerzos, el vendedor ha continuado operando de manera ilegal e insegura”.
Violaciones sanitarias y riesgos para el público
Los inspectores han documentado prácticas insalubres en el manejo de alimentos, incluyendo almacenamiento y preparación inadecuados, junto a la falta de mecanismos para mantener temperaturas seguras, lo que representa un grave riesgo para la salud pública.
El monitoreo comenzó el 28 de octubre, cuando inspectores se encontraron con el vendedor en Evans Avenue y Colorado Boulevard, emitiendo la primera orden de cese y destruyendo aproximadamente 120 libras de carne.
En una segunda intervención, el 31 de octubre, se decomisaron otras 25 libras de alimentos y se entregó una segunda orden de cese. Posteriormente, el 5 de noviembre, la ciudad envió una citación administrativa por correo, que fue reiterada en persona durante el incidente que generó controversia.
El incidente del cloro y la justificación oficial
El sábado pasado, la situación escaló en 2110 S. Colorado Blvd., donde el inspector vertió cloro sobre parte de la comida del vendedor. Campbell explicó que esta medida, aunque poco común, se considera un estándar en salud pública para prevenir la reventa o consumo de alimentos potencialmente peligrosos.
“Nuestro equipo tuvo que destruir la comida in situ ya que el vendedor no tenía un contenedor disponible, y dado el volumen de comida, resultó impráctico sacarla rápidamente”, dijo Campbell. “En ocasiones anteriores, el vendedor ha movido la comida antes de que pudiéramos deshacernos de ella de manera segura”.
Durante la inspección, se observó que el vendedor intentó trasladar aproximadamente 100 libras de carne de cerdo a un camión cerrado, negándose a permitir la destrucción de los alimentos. Esto llevó a los inspectores a verter cloro sobre los productos restantes para asegurarse de que no fueran consumidos.
Educación, cumplimiento y próximos pasos
La portavoz subrayó que el objetivo de la ciudad no es penalizar a los vendedores, sino salvar vidas y asegurar que operen de acuerdo a las regulaciones. “Somos conscientes de que muchos vendedores ambulantes trabajan arduamente para mantener a sus familias”, aseguró. “Estamos comprometidos a seguir educando y brindando recursos para ayudarles a cumplir con la ley”.
El DDPHE ya ha emitido una segunda citación administrativa y está preparando una tercera, según Campbell.
Este caso, uno de los más vigilados en las últimas semanas, reaviva la discusión sobre la seguridad alimentaria, la regulación del comercio y el delicado equilibrio entre proteger la salud de la comunidad y apoyar la economía informal.
Original source: Noticias Colorado
By Karen Gutierrez
19 Nov, 2025





