Activistas y líderes comunitarios se manifestaron este jueves frente a las instalaciones del Departamento de Policía de San Diego para exigir la destitución del oficial Daniel Gold, vinculado a la muerte a tiros del joven Konoa Wilson, de 16 años, que sigue en activo y ha sido promovido a detective casi once meses después del trágico incidente.
La protesta surge tras la reciente aprobación por parte del Ayuntamiento de San Diego de un acuerdo de 30 millones de dólares para compensar a la familia del menor, quien falleció el 28 de enero durante un operativo policial. Los activistas argumentan que esta indemnización no se traduce en justicia, especialmente cuando el oficial en cuestión no ha enfrentado consecuencias disciplinarias ni legales visibles.
Según los manifestantes, las imágenes del incidente evidencian el momento en que el oficial Daniel Gold disparó contra Konoa Wilson, quien supuestamente intentaba huir de otra persona que le estaba disparando. La coalición sostiene que el adolescente no representaba una amenaza directa para el oficial en ese preciso instante.
Tasha Williamson, activista y vocera del movimiento, manifestó que, en vez de ser sancionado, el oficial fue asignado a la División Central del Departamento de Policía de San Diego, donde actualmente desempeña funciones como detective con un incremento salarial del cinco por ciento.
“En lugar de enfrentar consecuencias, fue promovido”, afirmó Williamson.
Las demandas de los manifestantes también fueron dirigidas al Departamento de Policía de San Diego, la Fiscalía del Distrito y las autoridades municipales, a quienes acusan de falta de transparencia y de no ofrecer respuestas claras. Hasta la fecha, ha sido la Fiscalía del Distrito la única entidad que ha respondido, indicando que el caso sigue bajo revisión.
“Quiero ser clara: el oficial que mató a un adolescente afroamericano no debería seguir portando una placa”, añadió Williamson durante la manifestación.
Por su parte, la abogada de derechos civiles Genevieve Jones-Wright indicó que la responsabilidad recae en las autoridades municipales, que tienen la facultad de decidir quién puede continuar en funciones como oficial de policía. “Esto no puede ser visto como un hecho aislado. La policía debe rendir cuentas a la ciudad y a la comunidad”, afirmó.
Miembros de la Coalición de Equidad y Justicia señalaron que la muerte de Konoa Wilson no es un caso aislado y que es necesario abordar patrones que requieren acciones concretas, no solo comunicados de condolencias.
Yusef Miller, integrante de la coalición, exigió que el oficial Daniel Gold enfrente un proceso legal y sea removido de su cargo para prevenir que situaciones similares se repitan en otras comunidades.
Los organizadores anunciaron que en los próximos días presentarán una petición formal ante el Ayuntamiento de San Diego, reiterando su llamado a una mayor rendición de cuentas y reformas en las fuerzas del orden.
Fuente original: Noticias San Diego
Por Yanjane Meneses
19 Dec, 2025
