
Por Karen Gutierrez, Univision
Franktown, Colorado — 22 de diciembre de 2025
Uno de los eventos navideños más queridos de Franktown apagó sus luces antes de lo previsto, luego de registrar multitudes sin precedentes. El tradicional festival de luces, que ha sido organizado durante casi dos décadas por una familia local, tuvo que cerrar anticipadamente esta temporada debido al abrumador número de visitantes, impulsado por el clima cálido y la viralización del evento en redes sociales.
A lo largo de los años, familias enteras han acudido al festival para caminar, conducir lentamente o tomarse fotografías frente a la impresionante decoración navideña. Sin embargo, este año la asistencia del público superó con creces cualquier expectativa previa, lo que llevó a los organizadores a tomar una decisión difícil y emotiva.
Una decisión que respeta a la comunidad
La familia Raper, creadora y anfitriona del festival, comentó que el cierre no fue una orden de las autoridades ni un resultado de una queja formal, sino una decisión voluntaria tomada en respeto a los vecinos, dada la dificultad para controlar el flujo de personas.
“Nuestro desafío fue el volumen de personas en un periodo muy corto de tiempo. Era algo que estaba fuera de nuestro control limitar o poner una capacidad sobre cuántas personas podían estar al mismo tiempo. Esa fue la razón principal por la que tuvimos que cerrar”, explicó Tom Raper.
Incluso el lunes, personas continuaron llegando, solo para ser informadas de que el espectáculo ya no estaría disponible por el resto de la temporada.
De tradición local a fenómeno viral
Este festival, gratuito y abierto al público, se ha celebrado cada año durante casi veinte años y requiere entre seis y ocho semanas de preparación. Las temporadas anteriores promediaban mil asistentes por noche.
No obstante, este año, la combinación de temperaturas inusualmente cálidas y la difusión en redes sociales provocó un aumento drástico en la asistencia, con entre 6,000 y 7,000 visitantes en solo un fin de semana, muy por encima de su capacidad habitual.
La falta de mecanismos para regular el acceso o escalonar la llegada de los visitantes hizo imposible mantener el evento de manera segura y ordenada.
Un impacto que va más allá de las luces
A pesar del cierre anticipado, el festival dejó una huella significativa en la comunidad. Las donaciones asociadas al evento lograron recolectar más de 12,000 libras de alimentos, además de contribuciones económicas destinadas a bancos de alimentos locales.
Para la familia Raper, ese impacto comunitario es el corazón del proyecto.
“Obviamente es muy emocional para nosotros. Es algo muy cercano al corazón. Nunca se ha tratado de la cantidad de personas o de las donaciones, aunque la colecta de alimentos este año ha sido increíble, lo cual ha sido maravilloso para nuestra comunidad”, expresó Catherine Raper. “Lo que me rompe el corazón es no poder agradecerle a todos y decirles gracias por hacernos parte de su tradición navideña”.
Mirando hacia el futuro
De cara al próximo año, la familia Raper planea evaluar cómo podría retomarse el festival en 2026, buscando un equilibrio entre compartir su pasión, mantener el espíritu comunitario y gestionar adecuadamente las multitudes.
Mientras tanto, hacen un llamado a quienes deseen apoyar a que continúen donando a través de su sitio web, con el objetivo de seguir ayudando a los bancos de alimentos locales, aun cuando las luces se hayan apagado antes de tiempo.
Fuente original: Noticias Colorado
Por Karen Gutierrez
23 Dec, 2025


