Aumento Drástico de Persecuciones Policiales en Aurora Tras Cambio en la Política de Seguridad

Por Karen Gutiérrez, Univision
27 de octubre de 2025 · Denver, Colorado

Un cambio en la política de seguridad desata un aumento notable

Las persecuciones policiales en Aurora han experimentado un aumento drástico, multiplicándose por diez en los últimos seis meses. Este cambio se produjo tras la decisión del jefe de policía Todd Chamberlain en marzo de 2025 de ampliar las políticas que permiten a los agentes perseguir vehículos robados y conductores sospechosos de estar bajo la influencia del alcohol. Según reportes obtenidos a través de solicitudes de registros públicos por The Denver Post, desde el 6 de marzo hasta el 2 de septiembre, se registraron 148 persecuciones, comparado con solo 14 en el mismo periodo del año previo.

Este aumento no solo sobrepasa la cifra total registrada por el Departamento de Policía de Aurora (APD) en los últimos cinco años, que fue de 126 persecuciones combinadas entre 2020 y 2024, sino que también subraya el impacto de la nueva política sobre la seguridad pública.

Aumento en lesiones y riesgos asociados

No obstante, las consecuencias de esta política no han sido triviales. El número de lesiones se ha quintuplicado, pasando de seis a 33 heridos en solo medio año. Entre los lesionados, 24 eran sospechosos, cinco eran oficiales y cuatro conductores ajenos a los incidentes. De esas lesiones, una persona inocente y un sospechoso sufrieron heridas graves.

A pesar del aumento en lesiones, el porcentaje de persecuciones que resultaron en heridos (20%) es ligeramente inferior al promedio histórico del 25%. Un informe presentado por el monitor independiente, encargado de supervisar las reformas del departamento de policía, mostró una “satisfacción general” con las acciones de los oficiales, aunque destacó dos incidentes excepcionales que están bajo evaluación disciplinaria.

Resultados mixtos: más arrestos, pero también mayor peligro

Entre abril y agosto, la policía de Aurora llevó a cabo 100 persecuciones, lo que resultó en 87 arrestos. De estos arrestos, 67 individuos tenían antecedentes criminales, 25 estaban bajo órdenes activas de arresto, y 18 estaban en libertad condicional. El alcalde Mike Coffman defendió estos resultados como parte de una estrategia efectiva, destacando que “cuando atrapamos a un ladrón de autos, casi siempre se trata de un delincuente reincidente que utiliza el vehículo para cometer otros delitos, y esta política nos ha ayudado a encarcelar a quienes constituyen un verdadero riesgo”.

El 53% de las persecuciones culminaron en la detención del conductor, cifra similar a la asociada con vehículos robados (51%). Sin embargo, críticos han advertido que el creciente número de persecuciones incrementa el riesgo de accidentes y que ciudadanos inocentes pueden resultar dañados.

Disminución del crimen, pero con dudas sobre la seguridad

Los robos de automóviles en Aurora han disminuido un 42% entre enero y septiembre de 2025 en comparación con el año anterior, continuando una tendencia a la baja que comenzó en 2023. Por otro lado, en Denver, donde la policía aplica restricciones más severas y no persigue autos robados, se reportó una disminución del 36% en el mismo periodo.

“Al lanzar una red de persecución tan amplia, atrapas grandes peces, pero también generas accidentes”, advirtió Justin Nix, profesor de criminología en la Universidad de Nebraska Omaha. “Perseguir con frecuencia tiene consecuencias: personas heridas, incluso inocentes que no estaban involucradas en el caso”.

Demandas de transparencia y seguridad comunitaria

Omar Montgomery, presidente de la NAACP en Aurora, adoptó una postura de “neutralidad cautelosa” respecto a la nueva política, sugiriendo la organización de reuniones comunitarias en las que la policía explique los impactos y riesgos de esta. Manifestó: “La comunidad quiere asegurar que quienes ponen en peligro la vida de otros sean retirados de las calles, pero también desea proteger a los inocentes”.

En contraste, la activista Topazz McBride criticó la falta de comunicación del jefe Chamberlain, expresando su desconfianza en la imparcialidad del proceso: “No confío en que usen el proceso de manera justa y equitativa para todos, y no entiendo por qué no está dispuesto a discutir el tema”.

Aumento de fallas técnicas y demanda de supervisión adicional

El monitor independiente también reportó un aumento en las fallas durante la ejecución de la técnica PIT (Precision Immobilization Technique) utilizada para detener vehículos en persecución, atribuyendo estos errores a la falta de experiencia y entrenamiento. Se sugirió la instalación de cámaras en los tableros de los patrulleros, una medida que aún no ha sido implementada.

El alcalde Coffman reconoció: “Suena razonable, pero es costoso. Necesitamos presupuestar esta solución”.

El dilema entre beneficio y riesgo: un debate en curso

De las 18 agencias policiales del Front Range revisadas por The Denver Post, solo Aurora y la Oficina del Sheriff del Condado de Arapahoe permiten persecuciones de conductores ebrios, siendo las restricciones en Arapahoe más estrictas, permitiendo estas sólo si el conductor mantiene la velocidad por debajo del límite. En Aurora, se registraron 13 persecuciones por sospechas de conducción bajo influencia entre marzo y septiembre, de las cuales cinco resultaron en lesiones.

Para muchos críticos, el crecimiento en las persecuciones plantea un dilema ético y operativo. “No hay un número mágico”, explicó Nix. “Si persigues con frecuencia, habrá resultados negativos. Lo importante es demostrar que el beneficio para la seguridad de la comunidad realmente justifica esos riesgos”.