El Distrito Escolar Independiente de Socorro Enfrenta Duro Revés Financiero
El Paso, TX – El Distrito Escolar Independiente de Socorro (SISD) se encuentra en una situación financiera crítica tras el rechazo de la Proposición A, una medida diseñada para reorganizar la tasa impositiva del distrito y permitir el acceso a $49.2 millones adicionales anuales sin aumentar los impuestos locales.
De acuerdo con los resultados preliminares en el Condado de El Paso, el 53% de los votantes se opuso a la propuesta, mientras que un 47% votó a favor, marcando una diferencia de solo unos cientos de votos. Como consecuencia, el distrito pierde la opción de recibir casi 49.2 millones de dólares más cada año, lo que tendrá un impacto directo en su estabilidad económica y en el funcionamiento de diversos programas educativos.
El superintendente James Vasquez expresó que esta derrota representa un severo golpe, pero reafirmó el compromiso del distrito con la comunidad educativa.
“La Proposición A no resultó como esperábamos. Es, sin duda, un revés. Pero aceptamos la voluntad de los votantes y seguiremos adelante”, dijo Vasquez.
“Habrá algunas repercusiones por esto. Tendremos que tomar decisiones difíciles a partir de esta misma noche.”
La votación se llevó a cabo junto a una reunión de la mesa directiva, donde se planeaba discutir un nuevo plan de salud para los empleados. Vasquez indicó que, sin los fondos del VATRE, estos costes deberán ser asumidos por los trabajadores.
“Esperábamos que, con la aprobación de la Proposición A, pudiéramos cubrir parte de esos costos para que el impacto en nuestros empleados fuera menor,” añadió.
Aumentos y Recortes Inevitable
La administración prevé aumentos en las primas médicas del personal y no descarta la posibilidad de solicitar nuevos préstamos a corto plazo para cubrir operaciones, similar a lo realizado el año pasado. Además, se anticipa una disminución de aproximadamente 800 estudiantes el próximo ciclo escolar, lo que afectará los ingresos provenientes del financiamiento estatal y podría conllevar ajustes de personal.
“Ya proyectamos que tendremos unos 800 estudiantes menos el próximo año de los que tenemos actualmente. Menos estudiantes significan menos personal,” explicó Vasquez.
“Esperamos lograrlo mediante jubilaciones o renuncias naturales… Pero también tenemos que analizar los programas: ¿podemos seguir ofreciendo algunos de los que hoy tenemos para nuestros estudiantes?”
El superintendente subrayó que el distrito intentará evitar despidos a través de incentivos de retiro o separación voluntaria, como se hizo el año pasado, aunque admitió que las opciones son cada vez más limitadas.
Proyectos Suspendidos
Entre los proyectos más afectados se encuentra la renovación del parque tecnológico estudiantil, que incluye computadoras adquiridas en 2020 con fondos federales de alivio por la pandemia (ESSER). Estos dispositivos han alcanzado su vida útil y no hay financiamiento disponible para su reemplazo.
“Compramos una computadora portátil para cada estudiante con los fondos ESSER hace cinco años,” explicó Vasquez. “Ahora esas computadoras ya cumplieron su ciclo y han sufrido bastante uso durante estos años. Necesitamos actualizarlas y reemplazarlas, pero tendremos que empezar a establecer prioridades.”
Las reparaciones de los sistemas de aire acondicionado y el mantenimiento general de los edificios también se verán afectados.
“Tenemos edificios hermosos, pero ya están envejeciendo y sus sistemas comienzan a deteriorarse,” comentó el superintendente. “Necesitamos buscar cómo modernizarlos, pero ahora tendremos que ser muy cuidadosos con lo que compramos y cómo lo compramos.”
Lenguaje Confuso en la Boleta
A pesar de que la Proposición A no incrementaba los impuestos locales, la boleta electoral contemplaba, por ley, la frase “Esto es un aumento de impuestos”, un requisito estatal que, según funcionarios del SISD, pudo haber confundido a los votantes.
“Técnicamente estábamos aumentando la parte destinada a mantenimiento y operación, pero al mismo tiempo reducíamos la otra parte en la misma cantidad,” aclaró el miembro de la mesa directiva Manuel Rodríguez antes de la elección. “Así que el monto total se mantenía igual, pero obteníamos más financiamiento del estado.”
Vasquez coincidió en que la redacción de la boleta fue un obstáculo para la comprensión de los votantes.
“Es difícil. Las elecciones son complicadas. Ciertamente tenemos que hacer un mejor trabajo de comunicación o de explicación sobre algunos de los malentendidos que hubo,” afirmó. “Necesitamos averiguar qué fue lo que falló.”
Una Oportunidad Perdida, pero no el Fin
El superintendente confirmó que la ley sólo permite realizar este tipo de elecciones en noviembre, por lo que el distrito deberá esperar un año para volver a intentarlo. A pesar de ello, resaltó la participación récord en la votación.
“Tuvimos más de 7,100 votos a favor; es la mayor cantidad que hemos recibido en cualquier tipo de bono en el pasado,” indicó. “Lamentablemente, también hubo un número récord de personas votando en contra. Sabemos que debemos hacer llegar el mensaje a una comunidad más amplia.”
Vasquez también admitió que la confianza en el distrito sigue siendo un reto, tras años de controversias y supervisión estatal.
“Tenemos que acercarnos más y continuar con la transparencia que hemos mostrado durante el último año y medio,” mencionó. “Queremos que la comunidad vea cómo se gastan sus impuestos. Creo que esos 7,100 votos a favor muestran que la confianza está regresando, pero aún queda trabajo por hacer.”
Supervisión Estatal y Futuro Incierto
El representante de la Agencia de Educación de Texas (TEA) aseguró que la derrota de la Proposición A no afectará directamente el régimen de intervención estatal, aunque representa una presión financiera adicional.
“Lo que sigue siendo preocupante es cómo aseguramos que las finanzas del distrito se mantengan equilibradas, razonables y sostenibles,” comentó el funcionario. “La elección del VATRE es un mecanismo mediante el cual los distritos escolares de Texas pueden recaudar ingresos adicionales por su cuenta, así que habrá que tomar otras decisiones difíciles.”
Por el momento, Socorro ISD operará con un presupuesto equilibrado pero sin margen de maniobra. Con menos estudiantes, más gastos y sin los fondos adicionales esperados, el distrito se encuentra en una fase de austeridad y reevaluación. Aunque la derrota de la Proposición A no representa el fin, sí es una advertencia sobre la fragilidad de las finanzas y la imperiosa necesidad de reconstruir la confianza entre el distrito y la comunidad.
Original source: Noticias El Paso
By Miguel Contreras
5 Nov, 2025
